El que se queja por todo
Existen personas que prácticamente se quejan por norma, tienen este comportamiento tóxico que no solo les agota a ellas sino también, a quienes están alrededor. Las personas que se quejan por todo se consideran víctimas del azar e incluso, del universo. Idealizan la vida de los demás mientras asumen el rol de víctimas. El eterno pesimista que toma al pie de la letras sus pensamientos y los convierte en verdades absolutas.
Las que tienen exceso de expectativas
Existen personas que tienen un exceso de expectativas ante la realidad y esta es la mayor fuente de frustración interior. Las personas que tienen un exceso de expectativas son aquellas que esperan recibir tanto de la realidad que se bloquean cuando se dan cuenta de que nada está a la altura de lo que desean. Viven pendientes de su propia carencia en lugar de aquello que sí han logrado.
Las que viven en el pasado
Pasado, presente y futuro forman tres puntos distintos de la línea de la vida. En el plano de las personas infelicesencontramos un tipo de perfil muy concreto: el de las personas que viven en el pasado centradas en lo que pudo ser y no fue o centradas en una felicidad del ayer convertida en nostalgia. Otra forma de infelicidad en relación con el tiempo es propia de las personas que viven permanentemente ocupadas y centradas en el mañana.
Estos tres tipos de personas infelices muestran cómo en ocasiones, somos las personas las que podemos arruinar nuestra felicidad presente o todo lo contrario a través de la actitud: la decisión está en tus manos. En definitiva, solo tú puedes salvarte de la infelicidad porque el principio del cambio está en ti.
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